Cariñitos

De nuevo uno de esos días en los que las hormonas me consumen, definitivamente no tanto como de 9 meses para acá, yo creo que ni la décima parte, la verdad me siento muy bien, sin embargo, el estado físico reclama apapachos, cariños, un abrazo de cucharita, alguien que este despierto mientras yo trato de dormir, que me haga piojito... que me haga sentir que no irá a ningún lado hasta que me sienta mejor, y que lo disfrute. Lamentablemente no cuento con ese proveedor de amor y cariño físico, pero afortunadamente, cuento con un gran cariño verbal (o escrito, en su defecto. Quien dijo que las palabras no contaban, estaba muy equivocado.
Gracias personita, por esta noche tan acogedora, en 3 minutos levantaste mi ánimo... y tranquilizaste mi sueño.

La Chofer

Hoy estuve manejando prácticamente todo el día. Ya para altas horas de la madrugada, cuando ni mi cuerpo ni mis pies daban para más, decidí manejar despacio. Y ahí iba yo... sola en el carro, a pocos kilómetros por hora, por las calles oscuras y vacías. Iba pensando, analizando... y me di cuenta de que como ya dije... iba SOLA... Era como ir caminando en un parquecito, sin escuchar nada más que mis pensamientos y los ruidos extraños de los animalillos que ahí viven. Después de toda la tarde llena de gente, gritos y risas a carcajadas que solo sacaban más carcajadas, ese fue un momento de gran paz y tranquilidad, y no pude hacer nada más que agradecer.
Gracias por todos los momentos que he vivido últimamente junto a personas que nunca pensé que estarían en mi vida de manera tan presente. Gracias por recordarme todo lo que era y lo que quiero ser, y lo que soy. Gracias por todas esas carcajadas que me sacan y que hacen que me duela la panza, algo que hace mucho no sentía. Gracias por recordarme que lo simple es lo más lindo, que las cosas sencillas son las más bonitas, que lo fácil también es bueno... que hay que tomarse la vida relajadamente, que hay que disfrutar cada minuto, cada segundo, aún sea haciendo alguna estupidez, son cosas que no se olvidan.

Muchas gracias por la felicidad sencilla
Me encanta ver como a alguien puede hacerle tan feliz el simple hecho de que balancee el carro en un tope. Oir esas risas no tiene explicación.
Me encanta como un comentario de hace ya más de 4 años aun nos sigue haciendo reir.
Como un pedazo de tela comprado en la playa sigue haciendo historia.
Me encanta como unas cocas, unos ruffles, una cámara y el mar, pueden hacer las horas tan divertidas.
Me encanta sentir que la gente sabe que me tiene en cualquier momento, en cualquier lugar, aunque sea porque esten tristes a las 2 de la mañana porque su perro murió.
Me encanta como una banqueta me trae tantos recuerdos.
Me sorprende... como el verano pasado fue tan determinante para muchos de nosotros.
Nunca terminaría....
Solo puedo decir que me encanta la vida, me encanta mi vida, por mas arrastrones que me haya dado, la amo. Definitivamente despues de la tormenta sale el arcoiris... y vaya que me tocó uno grande.

Gracias.....

Una propuesta indecorosa

Ibamos platicando muy amenamente, como de costumbre. La buena plática con él es algo con lo que siempre puedo contar, es de las pocas personas que en verdad siento que me escuchan con mucha atención. De repente, salió al tema algo en lo que me puedo considerar una persona con amplia experiencia. Responder sus preguntas es lo que me toca a mi, pero ahora fue algo mas que una simple pregunta, fue una declaración....


-...es que me gustas - dijo él... la última persona de la cual esperaba escuchar eso - no te pido más que un simple beso.
Me quedé sin palabras, y la risa nerviosa me atacó. Me enteré de muchas cosas que tal vez en otras ocasiones hubiera preferido no escuchar, pero esta vez me hicieron sentir bien.

¿Mi respuesta?... un rotundo no. Resulta que, aunque él no lo pide, yo no lo puedo ver, ni me le podría acercar como algo más de lo que somos. También es mi mejor amigo, la única persona fuera de mi madre, que me vió llorar. Aún así, gracias. Gracias por brindarme ese nerviosismo que me gusta sentir y que hace que las cosas sean más interesantes.

Comprensión

Hablábamos de eso..
y dijo:

- Perdona si algún dia te hice sentir así...

Entonces econtré comprensión en el último lugar donde esperaba encontrarla.

Demasiado daño

Demasiado daño me hiciste... creo que hasta el momento no tienes idea de cuanto y nunca lo sabrás y no porque no te lo haya demostrado, o porque no te lo haya dicho porque más no pude hacer.. simplemente porque en tu estúpido mundo y encerrado en tu estúpida idea de que nadie te debe o puede querer me llevaste a mí... y creo que no lo creíste, no creíste que una persona fuera capaz de quererte como yo lo hice.
Discúlpame, debí haberte escuchado cuando me dijiste que no lo merecias, que no tenía idea de lo que estaba diciendo... debí aprender a escuchar esas incoherencias tuyas que al final vinieron siendo la verdad y que me pudieron haber evitado tantas cosas, tantos días llorando por ti, tantas depresiones y faltas de ánimo para hacer las cosas, tantos problemas...
Demasiado daño me hiciste, y creo que lo menos que puedes hacer por mi a estas alturas es dejar de aparecerte en mis sueños todas las noches, en mis pensamientos, en mis recuerdos... por favor, ya no te quiero recordar.

Almosa país de las maravillas.

...Y no precisamente porque mi vida sea lo mejor que me este pasando en este momento. Resulta ser que el cuento (y por lo tanto también la película) de Alicia en el país de las maravillas siempre me ha estresado. Digo, la niña paso por tantas cosas y fue a dar a lugares tan extraños, que al menos a mí me estresaban y hasta a veces no les encontraba como que.. ¿lógica?, no sé, la cosa es que siempre me estresó. El problema es que ahora creo que mi vida está lleno de eso.. de lugares extraños... de personas extrañas que a veces no me puedo explicar de dónde salen, por qué salieron, con qué fin están saliendo, y sobretodo, de momentos extraños que hacen que las cosas cambien, entonces creo que por lo tanto... mi vida me estresa.
Ya sé, ya sé... ¿qué sabe Alma de la vida y del estrés si apenas tiene 19 años y no sabe lo que le espera?... Pues probablemente no mucho, pero el poco problema que esto pueda parecer para los demás, para mí es algo que no me ha dejado pensar y andar muy en claro en estos últimos dias. Que bueno sería que todo terminara como el cuento, en donde Alicia se despierta y se da cuenta de que todo era un sueño (o pesadilla, según como se quiera ver). Así me gustaría despertar a mí y darme cuenta de que todos los errores que cometí en realidad no me van a afectar, porque no era más que un simple sueño.